top of page

Campaña contra feria de armas Expodefensa en Bogotá: "La guerra empieza aquí, aquí debemos pararla"

Lukasz Firla



"La guerra empieza aquí, aquí debemos pararla", es el lema principal de la campaña a la que el equipo en Colombia del Colectivo Solidario Acción Permanente por la Paz (APP) se ha unido desde agosto de 2023. La campaña, llamada No Más Expodefensa, se opone y aboga por el fin de una importante feria de armas que se celebra cada dos años en Bogotá, y que acaba de tener lugar por octava vez el pasado mes de diciembre.


Expodefensa se ha ganado el atributo de convertirse en la mayor feria de armas de América Latina, ya que reúne a más de 200 empresas que se benefician de la guerra, la vigilancia, la represión y la venta de equipos que los ejércitos y otros grupos armados legales e ilegales han utilizado y seguirán utilizando en al menos varias docenas de países.


La campaña está liderada por una coalición de activistas antimilitaristas, que en su mayoría son colombianxs o proceden de lugares azotados por la violencia y el imperialismo, y que llevan seis años protestando contra Expodefensa. La coalición de la campaña reúne hoy a organizaciones como Tadamun Antimili, la Asociación de Objetores de Conciencia de Colombia (ACOOC), War Resisters International, World Beyond War, Congreso de los Pueblos y otras. 


Como APP, nos hemos unido a esta coalición no sólo porque creemos que la comercialización de armas genera intrínsecamente más violencia y represión, sino también porque la gran mayoría, 51 de 220 de las empresas que expusieron en Expodefensa 2023, provienen de Estados Unidos. Ningún otro país, aparte de Colombia, ha tenido una presencia tan abrumadora en la feria. Creemos que esta participación de las empresas de Estados Unidos es una presentación más de las históricas intervenciones militares de este país y la implementación de  una política exterior que ha tenido un impacto destructivo sobre la población civil colombiana y la situación de los derechos humanos en este país.


El "Plan Colombia", financiado por Estados Unidos, no sólo ha intensificado el conflicto interno colombiano, causando el desplazamiento de 4 millones de personas, la mayoría de las cuales eran mujeres y niñxs, afectando desproporcionadamente a la población afrocolombiana e indígena de desde el año 2000, y a medio millón de mujeres sometidas a violencia sexual entre 2001 y 2009. 



Durante 2023, algunxs representantes de Estados Unidos empezaron a presionar para que se detuviera la financiación estadounidense destinada a apoyar los esfuerzos humanitarios y de paz colombianos y la reparación a las víctimas del conflicto interno debido a que el Gobierno de Gustavo Petro y Francía Márquez decidieron iniciar un proceso de diálogo con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y otros actores armados ilegales bajo los auspicios del plan Paz Total, es decir, propusieron recortar la ayuda ante una propuesta de paz que implica romper con la lógica de la guerra.         


Las actividades de la campaña No Más Expodefensa, en la que participó el equipo Colombia de APP, se centraron en oponerse a la organización de la feria en Bogotá, así como en denunciar la complicidad de las empresas de Expodefensa en la generación de sufrimiento humano y en la supresión de los derechos humanos, incluidos aquellos de los que han sido víctimas las contrapartes de APP. Lxs miembrxs de la campaña colocaron carteles en zonas populares de Bogotá, crearon una serie de vídeos que se compartieron en las redes sociales, entregaron una petición a la Presidencia de Colombia, organizaron un seminario web y organizaron una protesta pública creativa frente al recinto en el que se celebró la feria de armas, que incluyó teatro de calle y una exposición, un concierto, grandes carteles y un micrófono público que pedía que se pusiera fin a esta y a cualquier edición futura de Expodefensa.    




Como parte de este llamado, desde el Programa APP Colombia escribimos nuestra propia declaración pública para ser compartida durante la protesta. Hoy la compartimos con ustedes en esta publicación. 


Con nuestra más profunda tristeza también tenemos que compartir que Olga Castillo, convertida en defensora de derechos humanos debido a las violaciones contra sus derechos y los de su hija por parte de militares estadounidenses, murió dos días después de la protesta, el 8 de diciembre pasado, luego de una dura lucha contra el cáncer y la injusticia e impunidad vigentes.  Esta declaración es para ella y para Phanor Guazaquil, líder social del pueblo Nasa a quien APP acompañaba y quien fue asesinado el 3 de diciembre. Por ellxs y por todas lxs líderesas y lideresas sociales que han defendido y defienden los derechos humanos y se oponen a la militarización de sus vidas y sus territorios va aquí nuestra declaración. 





Colectivo Solidario Acción Permanente por la Paz – Colombia 

Declaración para el plantón organizado por la campaña #NoMásExpodefensa


6 de diciembre 2023


Hoy estamos de pie aquí frente a esta valla  que nos separa de algunas de las personas más poderosas que dedican sus vidas a destruir las vidas de lxs demás y de nuestro planeta. Las 220 empresas que están detrás de este muro existen gracias a personas para las que el beneficio económico es más importante que la vida y más valioso que los derechos, no sólo de los que estamos aquí, sino aún más de los que no pueden estar aquí.


Estamos aquí de pie en nombre de lxs 9.500.000 colombianxs que fueron asesinadxs, torturadxs, desplazadxs, desaparecidxs, amenazadxs y violadxs por personas que utilizaron armas fabricadas y compradas por lxs que ahora se dan la mano y firman nuevos acuerdos detrás de este muro.


Estamos aquí en nombre de Jessica Castillo, que fue violada cuando tenía 12 años por contratistas militares estadounidenses en una  base militar en Melgar. Estamos aquí en nombre de su madre, Olga Castillo, que está muriendo sin ver justicia para su hija a pesar de 16 años de lucha.


Ningún otro país ha suministrado más armas y dinero para intensificar el conflicto armado colombiano y causar más víctimas que los EE.UU. Hoy, 51 empresas de EEUU, están aquí para vender más armas, encabezando la lista de las empresas presentes.


Entre ellas, sabemos que:

Textron Aviation intenta vender su avión SkyCourier para misiones especiales de las fuerzas militares colombianas.


Aquila International está promocionando fusiles de Daniel Defense, y ambas están tratando de ampliar “proyectos secretos para operaciones militares especiales".


Navistar Defense promociona sus camiones tácticos utilizados por la infantería de marina colombiana.


Otras empresas venden piezas de armamento, barcos, sistemas de vigilancia, inteligencia artificial para usos militares y cosas que probablemente ni siquiera sepamos que existen.


Estamos aquí de pie en nombre de lxs siete jóvenes que nunca pudieron crecer a causa de las bombas lanzadas por un piloto colombiano desde aviones de guerra fabricados por Embraer, una empresa brasileña que hoy intenta vender más aviones.


Estamos aquí en nombre de las familias yemeníes cuyas vidas fueron destrozadas por las bombas MK 82 fabricadas por la empresa colombiana Indumil y vendidas al gobierno de Arabia Saudí, el cual es responsable de una de las mayores crisis humanitarias del mundo.


Estamos aquí denunciando el genocidio contra 2 millones y medio de nuestras hermanas y hermanos en Gaza, cuyas vidas y hogares son convertidos en pedazos por cohetes dirigidos por drones Heron, fabricados por Industrias Aeroespaciales Israelíes que están hoy aquí.


Estamos aquí en nombre de Dunya Rashid, de 19 años, cuya vida acabó a causa de una granada de mortero turca mientras recogía plantas silvestres con sus familiares en las montañas que dominan su pueblo del Kurdistán Sur. Dunya no es más que una de los miles de nuestras hermanas y hermanos kurdos, yezidíes, asirios y armenios que se han convertido en víctimas de las granadas de artillería y los sistemas de armamento fabricados por las empresas turcas Aselsan y Otokar y su socio italiano Leonardo, que también hoy están aquí.


Estamos aquí en nombre de Phanor Guazaquillo Peña, defensor de DDHH del pueblo Nasa, asesinado el domingo pasado en Puerto Asís por sicarios. Estamos aquí por los 155 defensores/as de DDHH asesinados por armas de fuego fabricadas por estas empresas que lucran con la muerte. 


Estas empresas y personas que están detrás de estos muros necesitan la guerra para crecer y enriquecerse aún más. Están aquí para hacer tratos que matarán a más Dunyas y más Phanores, que destruirán a más familias y convertirán más ciudades en polvo. No podemos quedarnos de brazos cruzados viendo cómo se llevan, destruyen, desarraigan y acaban con más vidas. Aquí empieza la guerra, aquí debemos pararla.


Por eso, nos levantamos y gritamos: ¡No más guerra! ¡No más armas! ¡No más Expodefensa!


Comentarios


bottom of page